El proyecto Smart-Snack se desarrolla básicamente en las escuelas.
Un grupo de técnicos formado por psicólogo/as, enfermero/as y maestro/as vienen a los centros en varias fases al principio y final de la intervención.
El proyecto Smart-Snack se desarrolla básicamente en las escuelas.
Un grupo de técnicos formado por psicólogo/as, enfermero/as y maestro/as vienen a los centros en varias fases al principio y final de la intervención.
El equipo de técnicos del trabajo de campo viene con unos 17 portátiles que se instalan en una sala del centro, normalmente en la biblioteca. Por grupos, los participantes hacen una hora de test neuropsicológicos en los que se evalúa la memoria, atención, razonamiento, reconocimiento de emociones y la toma de decisiones adecuadas a través de un juego de apuestas. También se toman medidas del peso y la talla de cada participante.
En una segunda visita, un grupo de enfermero/as visita el centro para sacar muestras de sangre y orina de los participantes. También miden la presión arterial y el diámetro de la cintura.
Normalmente, el último día de la segunda visita se hace un sorteo para saber qué equipo le ha tocado a cada participante. Equipo 1: fruta de temporada; o Equipo 2: fruta de temporada + nueces. En una tercera visita, se reparten las instrucciones para hacer un seguimiento adecuado de la intervención, i se dan bolsas de nueces al Equipo 2.
El equipo de técnicos vuelve al centro para hacer un seguimiento de cómo está yendo la intervención y a repartir más bolsas de nueces al Equipo 2.